Angélica Noviembre
Una mirada extraña
tan rara como imaginar un rostro
nacido en escorpión.
Angélica Noviembre
tu nombre suena casi único en mi mente
no tengo ya salvación.
Beso tu frente
disimulando el deseo de hablarte
y al menos sentir tu voz.
A veces sólo pienso que
no supe yo tocar tu corazón,
y pienso que no te andará
tan bien esa soledad,
déjame inventarte un algo
que, quizás, te venga bien.
Y encuentro de repente
tu rastro entremedio de tanta gente
tan lejos de una canción.
Angélica Noviembre
veinte años que ya ni se sienten
quién sabe dónde estás hoy.
Beso tu frente
disimulando el deseo de hablarte
y al menos sentir tu voz.
A veces sólo pienso que
no supe yo tocar tu corazón,
y pienso que no te andará
tan bien esa soledad,
déjame inventarte un algo
que, quizás, te venga bien.
Noviembre (¿?) de 1994.-
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