domingo, 30 de diciembre de 2007

Mis canciones: Palabras a mi hija


Palabras a mi hija



No soy cantor pero te canto

y más de una letra roja

me ha caído del alma,

y otro silencio antiguo

que me ha abierto una trampa

en esta vida tan extraña.


No soy poeta pero sueño

y del más puro intento

te escribo, hija mía

otro sueño de pobreza herida

nacida del rencor

de no verte crecida.


Vinieron quienes fueron

y no fueron quienes vinieron

y me privaron de más de una sonrisa tuya

y me quitaron de a poco la esperanza

y me dejaron muy fría la risa.


No soy el viento pero viajo

con argumentos de la vida ajena

labrando un camino tan duro,

tan duro como esta vida

que me ha golpeado

dejándome oscuro.


También he escrito alegrías

cuando Dios me ha puesto a mirarte,

y te he mirado, hija mía,

de reojo cantarle a mi vida

como no podría hacerlo mejor

el amor que te dio la vida.


No soy cantor pero te canto

como he caminado entre caminos espesos

de espinas tan altas y agudas,

clavándome la garganta que resbala

con la ironía de esta guitarra

que tampoco es mía...


No soy un hombre, sino tu padre

desvelado en la ironía de amarte

y no poder darte estas palabras

sin este temor de olvidarlas

en el extraño lugar en que habitan.


Más de un sueño me borraron

quienes no me explicaron nada

quienes creyeron sería mejor para todos

y, sin embargo,

no arreglaron nada,

abriendo este hoyo con su espada;

pero el filo es doble y la daga

corta lo que no alcanza

y mata lo que no debe,

y toca, sino corta, y corta donde empieza

a vivir lo que no acaba.


No soy cantor pero te canto, hija mía,

tan lejos, tan cerca,

estoy más viejo y menos grave

porque no sano de mis males,

y porque en vida he de verte corriendo

gritándole a tu padre

que lo perdonas por no ser culpable,

abrazando otro beso

de ésos que me diste en el aire.


Hija mía:

te dejo mi paso

entre esta gente que te conoce

y que me cree que te extraño,

y este escrito tan torpe

testigo de que te amo,

no ha de librarme del sueño,

y, mucho menos, callarme:

no soy cantor pero te canto,

no estoy junto a ti

pero igual te amo.


Mas han de pasar los años

y los besos

y el tiempo no calma la herida,

y el frío cae intenso;

pero en el día de la luz

has de mirarme despierta:

a tus ojos he de escribirles un poema,

y encenderles un trozo de esperanza.

Aunque confieso que aún te espero

en todo el remoto futuro,

y el anhelo de sacar el velo y la mentira,

y crearte un cielo acá en la tierra.


No soy tu vida y te vivo

como cien primaveras encendidas

y te encuentro

dándole una pausa

al interminable ocaso de mis días

y del mundo,

he de coronar la suerte de que seas mi hija.


Las noches oscuras de esta vida

son algo que se disfraza de luna.


No soy poeta y aún sueño

y si de flor he de abrir la lluvia

sea cada letra un pétalo,

o una rosa roja encendida en la espesura,

un libro sin nombre todavía,

un cuento vigilando tus sueños de niña,

un encuentro entre la vida y otra vida,

un canto a la primera poesía,

un adiós al invierno y a la lluvia.


No soy cantor pero te canto

y seguiré cantándole a tus días

y a mis días

porque me debo a tu sonrisa,

me debo a tu alegría:

seguiré cantando

porque siempre te esperaré

como te espero todavía...



En 1997.-

Mis canciones: Está bien (pero está mal)



Está bien (pero está mal)


Siento cómo la mañana enciende

los aullidos a la luna

que la lluvia irá a apagar

ahora nada va a parar,

pero la paciencia del silencio

es un tímido sentido

que la da la dirección,

que le da una dirección.


Hay algo más que no diré porque no quiero

si estás allí o si te vas, llévate todo

pero no quiero, pero no quiero,

pero está bien, está bien,

pero está mal, está mal,

pero está bien, está bien

tú verás.


Miro en la ventana un letrero

que dibujan un sombrero

no me fijo en el color

que no importa que era azul,

y encuentro que no hay nada de misterio

si ya sabes que en el medio

hace equilibrio la razón.


Hay algo más que no diré porque no quiero

si estás allí o si te vas, llévate todo

pero no quiero, pero no quiero,

pero está bien, está bien,

pero está mal, está mal,

pero está bien, está bien

tú verás.



En 1995.- Aproximadamente.

Mis canciones: Preguntas a Orión


Preguntas a Orión



Pregunto a Orión

si es que hoy puedo alcanzar tu sonrisa:

se estrella mirándome tierno,

me hace preguntas (sin respuesta)

¡No, por favor! – le dije yo enseguida

- dime la verdad, dime su verdad-.


Y parte en su rumbo

en el cielo dictándome cosas de todo tu mundo

hablando tan claro

elegía instantes y rosas de cuanto era absurdo.


Y comenzó así luego

a recitarme las palabras que te doy,

cabalgó en las ideas

que eran sueños en las trágicas historias

de lo bueno...


Le he preguntado otra vez

si es que hoy puedo mirar a tus ojos

me dice tan sólo que trate mirar hacia el fondo

(de tus sueños)

y escojo el tiempo que no hace ruido en el viento

de tu corazón, de mi corazón.


Y cada segundo

era un leño quemándose allá en lo más profundo,

bebiéndose el alma de todo a su paso,

encendiendo a todo moribundo.


Y se marchó despierto

prometiendo al día siguiente regresar

a descifrarme todo cuanto digas,

cuando escuchemos sus voces en el cielo,

en el cielo.



En Mayo de 1996. A la Lore.-

Mis canciones: Tú dirás que no


Tú dirás que no



Tú dices que no a la violencia

sólo en tu propia defensa

¿defensa de qué

si tú no sabes amar,

si tú no sabes perder?


Tú dices que no es hipocresía

y que elegiste un mal día

¿Mal día por qué

si tú no sabes creer,

si tú no sabes crecer?


Esta vez sin lastimar,

sin derribar

me iré,

pero esta vez

sin decir más,

sin llorar más

me iré,

sin mirar atrás.


Tú dirás que nunca fuiste mía

ésa será tu fantasía

¿Negarme por qué

si tú no supiste amar,

si tú no puedes perder?


Tú dirás que todo fue mentira

esa es toda una ironía:

¿Mentirme por qué

si tú no sabes creer,

si tú no sabes crecer?


Esta vez sin lastimar,

sin derribar

me iré,

pero esta vez

sin decir más,

sin llorar más

me iré,

sin mirar atrás.



Julio 10 de 1996.-

Mis canciones: Canción para los que no tienen luz



Canción para los que no tienen luz

(o para los que son dueños de la verdad)



Los alquimistas de cuatro aristas

son rostros de muerte azul;

simios artistas, infrarrealistas,

decrépitos hilos de luz,

cuasi internautas, pseudo Argonautas,

devórense la exactitud,

dejen la vida encantada:

similis similibus curantur.


Mas el secreto inicial del sol

déjenlo para el final,

no sé por qué soy yo

quien siente este dolor

me quiero despejar,

no quiero ya escuchar:

delirios de verdad.


Mas el secreto final del sol

déjenlo para empezar,

yo sé por qué eres tú

quien siente ese dolor:

porque no tienes luz.


Ángeles sabios, demonios alados,

vampiros de la realidad,

débiles hombros, magos del asombro,

jinetes llevando maldad,

grillos sin canto de gente silbando

canciones vacías de amar

cruzando los campos de flores

matando la fría ilusión de soñar.



Diciembre 13 de 1996.- En la tarde.

Mis canciones: Y al final



Y al final



Y al final que todo

era una prisión del no sé qué,

del algo, del tal vez.


Y seguro que todo

estaba escrito desde ayer

y a medias lo encontré


¿O no?


¿O no?




Abril 6 de 1996.- En Sábado Santo.

Mis canciones: Un ícono del sol


Un ícono del sol


A veces estoy harto de andar

me parece un tanto dispar

las luces se vendieron

justo en navidad.


Existen otras cosas, pensé

ya no encender las rosas ni el tren,

las cosas se escondieron

de su propio riel.


Me marché muy lejos

después

y comencé las lunas

soñé

mis dulces en el frío

tiré

y un algo aparecido

olvidé

lejos de aquí, yo

recordaré:

¿Qué me encerró en mi canción?

¿Quién me cegó si no fui yo?

¿Quién hace un juicio de su Dios?

¿Quién hace un ícono del sol?


Hundidos en espacios se ven

los círculos vacíos vender

una sonda hacia el mismo destino

va a llover.



Finales de Marzo, inicios de Abril de 1996.-

Mis canciones: Todos, menos yo


Todos, menos yo


Me habló de un cuadro en su interior

y no me explicó la razón,

y aunque quise entrar

los conté a todos, menos yo

que era parte de otra situación.


La misma nota es su canción

pero la letra es mi lección,

no pude escuchar:

cantaron todos menos yo

que me fui de ahí al corredor.


Y una ilusión que se ha oxidado

es más difícil de lograr

que se mueva, que se vaya,

que se olvide dónde estoy.


Y la inocencia es su soldado

en una guerra de olvidar

que se muera, que se salga,

que se olvide de quién soy.


Me habló de un cuadro que ella vio

y que no supo si ocurrió

y aunque quiso estar

segura en todo, me culpó

que era aquello que ella no buscó.


Ahora me siento su ladrón,

me llevé un algo de su flor

y aunque no vendrá

me arreglé todo, menos yo

que vivo en otra dirección.



Abril de 1996, en sus primeros días.

Mis canciones: Barbiel


Barbiel



Pasa un instante y ya es un siglo

todo cenizas,

impresionaste a los demás,

en vez de ombligo

usaste todos tus sentidos

y te perdiste allí detrás.


Y decidiste que era un soplo

todo lo demás,

y te escondiste hasta explotar.


Y ya no sientes si es instinto

o es tu cabeza,

ya no distingues la moral;

en el espejo se estrelló,

tal vez, algún signo,

en el estímulo incapaz.


Y decidiste que era un soplo

todo lo demás,

y te escondiste hasta explotar.


Estériles segmentos

que huelen a excremento

hay en el pavimento

te exigen otro intento

y oran por tu silencio,

y ya no sé si es cierto

si es todo tan incierto

ahora no sé si siento

o es que te engaño y no lo sabes

¡qué contratiempo!.



Marzo 28 de 1996.- A las 17:30 hrs.-

Mis canciones: Muriel


Muriel


Esta historia no comienza

con formales arquetipos

ni con ejemplares discursivas

sobre la decantación de los principios

que impulsaron la continuación

de todo aquello que era cierto

y que tenía su razón de ser, Muriel.


Esta historia no es perfecta,

mis incrédulos cuadrantes,

me han herido las distancias,

lo preciso, lo tajante,

lo divino a lo divino,

lo humano a lo mundano,

se ha sumido en su misterio,

en su divisa, en su propia ambición real.


Esta historia es un pretexto bueno

para decir cómo fui

desenredando el frío mundo

que me toca por vivir;

esta historia es más que una esperanza

que se quiebra antes del fin

del último tiempo de la tierra,

de la vida en el jardín.


Esta historia no es sencilla,

no es preciosa, no es semilla,

es un instinto, es una rosa,

es una fábrica de la intención del cromosoma,

en fin, del último de los estilos

que perfilan la tendencia, la decadencia,

la autodestrucción total.



Marzo 28 de 1996.- Un día Jueves a las 13:06 hrs.-

Mis canciones: Meses


Meses


Trabajo buscándome trabajo

a veces pasan meses y meses

y no pasa nada.


Todos se pelearon con todos

a veces pasan meses y meses

y no pasa nada.


Yo que escribo puedo hablar

de cosas que no sé,

y las recibo de los enemigos

(se hacen miel).

Yo sé que hay alguien aquí

que aún me quiere oír.


Sexo, tú sabes lo que es “exo”

a veces pasan meses y meses

y no pasa nada.


Amor, me suena a dolor

a veces pasan meses y meses

y no pasa nada.


Y si camino en dirección correcta

puedo dar con los desvíos

de los entrepisos sin moral.

Yo sé que hay alguien aquí

que aún me quiere oír.


Olor a comida viene de la cocina

a veces pasan meses y meses

y no pasa nada.


Cubiertos estamos descubiertos

estamos apretados sintiéndonos

el hábito mojado.


Y si camino en dirección correcta

puedo dar con los desvíos

de los entrepisos sin moral.

Dime si acaso hay alguien

que aún me quiera oír.



Marzo 26 de 1996.- Un día Martes.

Mis canciones: Hamaliel


Hamaliel


Yo sé Hamaliel

que no queda nada

para tenerte aquí.


Yo sé muy bien

que no tengo nada,

yo sé muy bien que vendrás.


Yo te amaré en el ocaso.


Yo te amaré en cada paso que des.



Marzo 26 de 1996.- Martes, 21:15 hrs.

Mis canciones: Pan


Pan


Panzón, panfleto,

pantufla, pantalón,

pancarta, pantera,

pan de pascua, panadol,

Peter Pan,

Marcelino pan y vino pa´ tomar,

pandero pa´ tocar,

pan duro: colegial.


Pancrasio, pantalla,

pantruca, Panamá,

panadero, panacea,

Panasonic, pantanal,

pandora, pan fresco,

pan dulce, pan normal,

pan de huevo, pan de molde,

pandereta, pan con pan.

pan para pan pan

pan pan!


Junio de 1994 – Marzo de 1996.-

Mis canciones: Mañana


Mañana



Por cierto que mañana me levanto,

me decido una vez más,

por cierto que mañana lo haré,

y cierto es que mañana todo es lindo,

todo un híbrido pesar,

por cierto que mañana lo sabré.


Por cierto que mañana

los heridos corazones oprimidos,

por cierto que mañana no estarán,

y cierto es que mañana es todo antiguo,

todo un típico lugar,

por cierto que mañana viviré.


Lo cierto es que mañana es un instante incierto,

la terca indecisión de comenzar,

y cierto es que no encuentro un ápice en las garras,

una señal donde poder cruzar.


Por cierto que habrá números

y días que me dirán dónde estoy,

por cierto que mañana no vendré,

y cierto es que el estímulo fracaso de las horas me verá,

por cierto que mañana llegará.


Lo cierto es que no tengo las orillas mojadas

y el árbol me ha pedido descansar,

y cierto es que mañana se enferma la nostalgia

y entiendo la afición de los que dan.



Marzo 22 de 1996.- Viernes, 20:00 hrs.-

Mis canciones: Yo me iré (Uriel)

Yo me iré (Uriel)



Da la casualidad que queda explorar

el fondo nada más es todo lo que tengo hoy,

si fuera por andar entre publicidad

te quiero convencer que esquizofrénico no soy,

si llenas tus bolsillos con mis sacrificios

yo no preguntaré...

no intentes evadirte, no trates de dormirte

pues no te miraré.


Yo me iré, yo me iré

yo me iré,

sonreiré, lloraré,

yo me iré sin ti.


Deshago las palabras que me dicen nada

y sigo con lo de antes como si fuera placer,

y nótese que de antes ya lo descifraba,

todo lo sabía, estaba todo escrito ayer;

no me digas: sigue; no me digas: para

yo no te escucharé...

publica mis canciones, publica mis temores

pues yo ya no estaré.


Yo me iré, yo me iré

yo me iré,

sonreiré, lloraré,

yo me iré sin ti.


Tonto parecerá que me hagas animar

paisajes que el otoño se ha dejado de dejar,

como si no supieras que la vida es triste

cuando no se acaba todo lo que hace mal;

y, ahora que soy joven, temo equivocarme,

temo hacer tan mal...

con todo en el intento: todo inaccesible,

ya no seguiré.


Yo me iré, yo me iré

yo me iré,

no vendré, no estaré,

yo me iré sin ti.



Marzo 25 de 1996.- A las 17:11

sábado, 29 de diciembre de 2007

Mis canciones: El sol del mediodía francés


El sol del mediodía francés



Vas donde no vas

por la pared dejando un rastro que ver,

ves de color

eres hijo del sol del mediodía francés.


Y hubo una razón

de todo a tu alrededor,

algo andaba muy mal

dentro de ti o fuera de mí.

¿quién eres tú para salvar

los muertos que están pidiendo por ti

en un rincón de tu indecisión,

por la realidad o la irrealidad

de este sol del mediodía francés?


Eres juglar

de circunstancias que da la vida a la soledad

te creí normal

se rompió lo casual, se rompió la verdad.


Luego hubo un adiós

que, pero, nunca volvió,

algo andaba muy mal

creo que era así o tal vez no.

Y dime:

¿quién eres tú para aclarar

toda esta obscuridad?

¿quién eres?, dí,

no quiero gritar por la ciudad

donde brilla el sol del mediodía francés.


Por la ciudad donde vivo yo,

donde vives tú,

vive el sol.



Febrero, Marzo de 1996.-

Mis canciones: Semillas


Semillas



Las estrellas de tu noche

alumbran mi alma en esta noche

como tú

la nostalgia es imprecisa,

siempre iluminada y triste

por tu luz,

y aunque siempre tengo esa ciudad

escondida al fondo de mi hogar,

el invisible espectro

siempre llega a tiempo a recordar.


Las semillas de tu porvenir

florecerán en mi alma

como tú

eso le dice la palabra

a aquella idea que no está,

y ahora se hace sitio respirar,

para estar contigo para estar,

en el extremo hace equilibrio

el indivisible corazón.


Y ahora se deshizo en los demás

justo que es preciso rescatar

lo impredecible, la verdad,

todo lo que ahora no estará.


En fin concluyo cuáles cosas

necesitas para amar:

algo que te lleve,

que te compre,

que te dé lo que no das;

tú no necesitas soledad,

tú no necesitas valorar,

tú necesitas los esclavos del dinero

y no amar.



Enero 26 de 1996.- Jueves, a las 20:47 hrs.

Mis canciones: La otra verdad


La otra verdad



Si llego a pensar

que ante todos se derrumbará

la otra verdad

que construimos sin hablar,

sin desechar la oportunidad

de lanzar todo contra el mar,

y doblegar la resignación

de ser un número anormal.


Y si rompo mis esquemas

dentro de esta pieza

y si digo lo que pienso

y no pienso lo que digo,

y si canto y desafino

y rompo mi cabeza

¿tú entenderás?

Si conoces esa historia

lánzale una piedra

al pasado de la esquina,

al mundo congelado,

si quiebras mi ventana

vendrá la policía y te detendrán.


No quiero ser un número archivado

en un papel que está guardado

en un cajón de la ironía,

no quiero ir a parar a un escritorio

donde otros ya llegaron

y se quedaron igual.


Si llego a pensar

que ante todos se derrumbará

la oportunidad

de lanzar todo contra el mar,

y si rompo mis esquemas

lanzándoles la piedra

y si digo lo que pienso

al mundo congelado

y si canto y desafino

y rompo tu ventana

vendrá la policía

y me detendrán.



Mayo de 1994.-

Mis canciones: Sueños del quinto piso


Sueños del quinto piso



Sueños elegidos

en el quinto piso

permiso para recordar

años entre sitios,

árboles de vidrio

llevan escrito la verdad.


Háblales tus largos siglos,

cédeles tus precipicios,

tállales sus nombres en el sol.


Años de los signos

hijos del oficio

de hallarse solo en la ciudad.


Hablaré todos los siglos,

cederé mis precipicios,

tallaré sus nombres en el sol.


No encontraré los mismos niños

que cuando me fui,

no encenderé todos los cirios

del mismo jardín,

me perderé buscando signos de encontrar,

continuaré siguiendo rumbos que no van.


A dónde no fuimos,

dónde nos perdimos,

mar con mar de toda eternidad?


Hablarás tus largos siglos,

cederás tus precipicios,

tallarás los nombres en el sol.



Enero 20 de 1996.- Sábado.

Mis canciones: Casi


Casi


Casi iguales, casi nada

casi una intención,

y aún es tarde

aún es siempre

otra indecisión.


Casi un ave, casi un cielo

casi una instrucción,

y aún no cabe,

aún no sale

otra tribulación.


Casi un hombre, casi un cerdo

hoy, casi un espíritu del sol

crece casi hembra,

casi estorbo,

hoy muere

casi una aberración igual,

casi un árbol,

casi un monstruo,

hoy sigue pensando el corazón igual.


Casi ahora, casi nunca

casi otra obstrucción,

y aún no tiene,

aún no pierde

otra simulación.


Casi perro, casi luna,

casi un invasor,

y aún es jueves,

aún entonces

otra traducción.


Casi un hombre, casi un cerdo

hoy, casi un espíritu del sol

crece casi hembra,

casi estorbo,

hoy muere

casi una aberración igual,

casi un árbol,

casi un monstruo,

hoy sigue pensando el corazón igual.



Enero 18 de 1996.- Jueves a las 19:30 hrs.